
Nuestro artículo de hoy se expone en formato entrevista, para tratar de aclarar negro sobre blanco dudas y suspicacias típicas cuando se habla de formación bursátil.
P. Buenos días, Yolanda. La pregunta obvia: ¿por qué ofreces formación bursátil?
Y. Bueno, esta es probablemente una de las preguntas más sencillas de responder. Desde siempre me ha gustado la formación. Dar clase es algo que me gusta y me hace sentir bien. No veo por qué no iba a poder hacerlo en este ámbito también. Además, como traders supongo que igual que la mayoría de la gente que se ha metido en este mundo, ha habido momentos en los que lo he pasado muy mal. Yo misma he recibido formación y he tenido algo de ayuda cuando han llegado esos malos momentos. Al haber pasado por eso, y haberlo superado, creo que estoy en condiciones de ayudar a otros y facilitarles el camino. Ofrezco aquello que me hubiera gustado recibir cuando estaba en ese punto en el que no veía una salida exitosa.
P. Sí, pero es normal preguntarse: si conoces una fórmula infalible para ganar dinero en bolsa, ¿por qué no utilizarla para forrarse? ¿Qué necesidad hay de dar cursos?
Y. Esas preguntas solo se las hace quienes no saben en qué consiste operar en bolsa. No quiero ofender a nadie, pero alguien que formula una pregunta así es alguien que no entiende cómo funciona la operativa bursátil, y está condenado a perder todo el dinero que meta en el mercado. Hay varias cuestiones. En primer lugar, no existe ninguna fórmula infalible. Ese es uno de los motivos por los que la mayoría de la gente pierde dinero: buscan una fórmula, un Santo Grial que les garantice unos beneficios constantes y estratosféricos. Eso no existe. Por tanto, si alguien te ofrece un curso en el que te va a enseñar algo así, desconfía de él porque es una estafa. En segundo lugar, es un error pensar que vas a hacerte rico por operar en bolsa. La bolsa es un negocio. ¿Cuántos negocios hay cuyos dueños se hacen ricos y cuántos hay que dan para vivir? Claro que uno puede hacerse rico operando en bolsa, pero no es lo habitual. También hay gente que se hace rica siendo médico, pero tampoco es lo habitual. Y cuando alguien estudia medicina, dudo que lo haga pensando en que se hará rico. Y si lo hace, se equivoca,
P. Bueno, pero si ganas lo suficiente para vivir de la bolsa, ¿Por qué no das los cursos gratis? ¿Por qué no dejas tu trabajo y te dedicas solo a la bolsa?
Y. Son dos preguntas diferentes, con respuestas relacionadas. Para dar un curso hay mucho trabajo detrás: muchas horas de preparación de documentación, guiones, ejemplos, temarios. Muchísimas horas de ensayos, pruebas, corrección de errores. Cursos piloto con gente de confianza para depurar los cursos, grabación y visionado de horas y horas de clase. Todo con el fin de poder ofrecer un curso de calidad. Y luego, el curso lleva unos costes: alquiler de sala, transporte, alojamiento, comida, mantenimiento de la web, publicidad… Todo ese esfuerzo y esos costes no se pueden regalar. Yo, por ejemplo, antes de dedicarme a la bolsa, solo tenía como fuente de ingresos mi trabajo como contable. Me ganaba la vida muy bien. Pero cuando alguien, fuera de mis horas laborales, me pedía que le hiciera la declaración de la renta, a menos que fuera alguien muy allegado, no se la hacía gratis. Lo normal es cobrar por tu trabajo. En cuanto a lo de tener mi trabajo y no dejarlo… Bueno, como ya he dicho, la bolsa puede dar para ganar un sueldo, incluso puede haber casos en los que se pueda ganar mucho dinero. Pero los ingresos de la bolsa no son ni constantes ni seguros. Puede haber un mes en el que ganes el sueldo de dos, pero también puede haber meses en los que lo pierdas. En bolsa, lo que cuenta es el resultado al final del año. Si al final del año has ganado un sueldo anual (y aquí cada uno tiene unas necesidades diferentes), habrás tenido éxito. Pero hay que comer todos los días, y aunque un año lo acabes con un tremendo éxito, si el primer mes del año lo has acabado con pérdidas, no podrás comer los dos primeros meses. Tener un trabajo con una nómina te da una seguridad y una tranquilidad que también repercute en tu operativa. Se opera con mucha menos presión si sabes que
el plato de lentejas lo tienes garantizado, que si sabes que el plato de lentejas depende de que la operativa te salga bien. Además, si para sacar ese sueldo en bolsa hubiera que dedicarse 8 horas diarias a operar, sería plausible dedicarse solo a ello si ganas más que en tu trabajo convencional. Pero yo por ejemplo, no le dedico más de una hora al día. Es perfectamente compatible y no me obliga a elegir.
P. Y ¿por qué no le dedicas más? Quiero decir, si dedicándole una hora ganas un sueldo, dedicándole 4 ganarías 4 veces más, y dedicándole 8 ganarías 8 veces más.
Y. Es que no funciona así. En primer lugar, la operativa en bolsa es agotadora. Yo opero una hora o menos al día de media, y acabo agotada. No sé cómo acabaría si operara 4, no digamos ya 8. ¿Tú sabes lo que es estar totalmente concentrada, apenas sin pestañear, en tensión, durante una hora? Es agotador. Acabas exhausto. Pero es que además, el mercado no da oportunidades todo el día. La mayor parte de las oportunidades las da en unas franjas de tiempo muy concretas. El resto del día se dedica a deambular sin rumbo. Operar en esos momentos es prácticamente como jugar a la lotería. A mí me gusta hacer operaciones en las que estoy muy segura. Y aunque la seguridad absoluta nunca la puedes tener, cuantas más cosas haya a favor de tu operación más probable es que salga como esperas. Y esto no sucede todo el tiempo. Incluso hay días que ni siquiera sucede y en esos días no merece la pena ni intentar operar.
P. Bueno, pero siempre puedes meter el doble, o el triple de dinero, y entonces multiplicar los beneficios.
Y. No, tampoco. Porque ahí entran dos factores: por un lado, al aumentar la apuesta aumentas el riesgo. Una cosa segura que tienes como operador, es que va a haber operaciones que te van a salir mal. Otra es que va a haber ocasiones en las que vas a tener varias operaciones malas seguidas. Si operas con el doble de dinero, estas pérdidas van a hacer que pierdas el doble. Si operas con el triple, perderás el triple. El aumento de la pendiente de la reducción del capital es exponencial. No es algo que se entienda de forma intuitiva, pero son matemáticas. Y eso puede hacer que pierdas tu cartera y te quedes fuera del negocio. Por otro lado, está el tema de la presión. El principal enemigo del trader es uno mismo. Operar con el doble de dinero te hace tener el doble de presión, es inevitable. ¿Has visto alguna vez una eliminatoria de fútbol a penaltis? ¿No has visto nunca a un jugador que marca casi todos los penaltis que tira fallar por la presión de saber que de su lanzamiento depende el campeonato del mundo? Pues en la bolsa sucede lo mismo. Cuanto mayor es la presión, mayor es la posibilidad de cometer errores.
P. Entonces, si no hay fórmulas infalibles, ¿qué es lo que enseñáis en vuestros cursos?
Y. Yo creo que en las únicas disciplinas en las que hay cosas infalibles es en matemáticas y física, y ciencias relacionadas. Y con matices. En medicina o derecho, por ejemplo, no hay nada infalible, y sin embargo hay facultades donde se estudia y se enseña medicina y derecho. En bolsa ocurre igual. Hay conceptos, técnicas, metodologías que pueden explicarse y se pueden utilizar. Eso es lo que enseño en mis cursos. Cosas que a mí me funcionan. Yo no garantizo que a todo el mundo le vayan a funcionar. Depende de la persona, y en todo caso, el alumno tiene que hacer un enorme trabajo después. En parte de ese trabajo puedo ayudarle y eso forma parte del programa formativo. Pero hay una parte que tiene que hacer el alumno en la que nadie le puede ayudar. Es un camino que ha de recorrer él. Lo que sí puedo decir es que lo que enseño en mis cursos me funciona a mí, y sé que le funciona a mucha gente.
P. En este punto surge una pregunta obvia. ¿Cómo demuestras que funciona? ¿Publicas tus resultados?
Y. Al principio me lo planteé. Podría publicar mis resultados y demostrar que lo que digo que funciona, funciona realmente. Pero al final decidí no hacerlo. Por dos motivos. El primero porque publicar resultados no demuestra que ganes dinero. Es una práctica que sé que se hace (no daré nombres) y además es muy sencillo de hacer si dispones de recursos suficientes. Si dispones de 80 mil euros, abres 16 cuentas de CFD's de 5000. En 8 de ellas, haces una operación y en otras 8, la contraria. Cuando en 8 de ellas lleves ganados 5000 euros, en las otras 8 llevarás perdidos otros 5000, es decir, habrás descapitalizado 8 cuentas. Y ahora tendrás 8 cuentas con 10 mil euros cada una, así que cierras la operación. Y ahora haces otra, en 4 cuentas en un sentido y en las otras 4 en el contrario. Y esperas a que en unas hayas ganado otros 10 mil. En ese momento, 4 cuentas tendrán 20 mil y las otras 4 estarán quebradas. Vuelves a cerrar. Y repites, esta vez 2 en un sentido y 2 en otro, y esperas a que en dos ganes 20 mil y en otras dos los pierdas. Ya te quedarán 2 cuentas con 40 mil cada una. Ahora haces la última, una en un sentido y otra en otro, y esperas a ganar/perder 40 mil. Al final, tendrás una cuenta que empezó con 5000 y ahora tiene 80 mil y 15 cuentas que empezaron con 5000 y están quebradas. Y la que enseñas, incluso ante notario, es la que queda. ¡¡Fíjate qué buen trader, has llevado una cuenta de 5000 a 80 mil!! Repito, sé de gente que lo está haciendo, aunque no puedo dar nombres. De hecho es muy habitual. No demuestra nada. Por eso decidí no hacerlo. La otra razón es que si tú le dices a alguien: 'pues mira, yo gano tanto al mes', de alguna manera le estás condicionando. Porque va a considerar un fracaso si no llega a ganar eso, o puede llegar a lo que conocemos como complejo de dios si consigue ganar más. Por eso, lo mejor no es decir cuánto ganas ni publicar nada. Lo que hago para demostrar que lo que explico funciona es operar en directo, con mi cuenta, en tiempo real. Ahí no hay manera de manipular. Estás en directo. Entras en una operación, y aunque pretendas hacer trampas haciendo la contraria en otra cuenta, eso solo te sirve para no perder si la operación sale mal. Pero la gente que te está viendo operar estará viendo que estás perdiendo dinero. Si operas varias veces por semana durante un mes en vivo, y al final de ese mes en esas operaciones el cómputo general es de ganancias, habrás demostrado sin lugar a
dudas que lo que explicas funciona. Y esas sesiones en vivo forman parte de la formación 'avanzada'. Además, periódicamente publico videos en Youtube con mi operativa. Un día cualquiera grabo lo que hago y sin cortes en el video lo publico en Youtube. En esos videos se ven todas las operaciones seguidas, tal cual sucedieron, las que salieron bien y las que salieron mal.
P. Pues muchas gracias por tu colaboración. Te deseo mucha suerte en tu proyecto.
Y. Gracias a ti.